Influencia de la robótica en el desarrollo intelectual y profesional

Partamos del concepto que describe la robótica como la técnica que se utiliza en el diseño y la construcción de robots y aparatos que realizan operaciones o trabajos, generalmente en instalaciones industriales y en sustitución de la mano de obra humana. Emprender, aprender a expresar nuestros sentimientos o desarrollar habilidades de trabajo en equipo, incluso el simple ejercicio de la memoria son algunos de los beneficios que la robótica aporta a quienes la practican.

Cada vez son más los inventos que vemos dentro y fuera de las campañas de diversas marcas y/o empresas, relacionados con la robótica y programación para el público infantil. Aunque muchas veces se critica esta posición, es importante tener en cuenta que el objetivo principal no es educar máquinas que sepan programar a los 10 años, y sí ofrecer herramientas para cultivar habilidades que este tipo de actividades pueden proporcionar.

Beneficios de la robótica en la educación y el desarrollo infantil

Cada vez más, la robótica está siendo implementada como herramienta educativa y pedagógica, pues facilita que los niños y niñas puedan comenzar a desarrollar desde edades bien tempranas, y a través de actividades de tipo lúdico, capacidades que les serán de enorme utilidad en sus vidas futuras.

La robótica es un compendio de diferentes disciplinas que aporta a los niños conocimientos relativos a Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas. Transmitirles de una manera transversal y divertida este abanico de conocimientos facilita el desarrollo del pensamiento lógico, al mismo tiempo que estimula su creatividad y les permite familiarizarse con el funcionamiento de objetos programables con lo que, de hecho, ya están en contacto a diario.

Son muchas las ventajas y los beneficios que la robótica aporta a la educación y al desarrollo de los niños, de ahí que sea tan aconsejable introducirla en el currículum escolar desde edades tempranas:

  • Permite que los propios niños se involucren en sus propios procesos de aprendizaje.
  • Mejora su autoestima y su afán de superación, al mismo tiempo que les ayuda a mejorar su tolerancia frente a la frustración.
  • Fomentan el desarrollo del pensamiento lógico, de la intuición científica, de la creatividad…
  • Desarrolla sus habilidades para la resolución de problemas y para la investigación.
  • Desarrolla sus habilidades para la lectura y la escritura.
  • Facilita que la consecución de metas y objetivos se convierta en un hábito.
  • Les forma como sujetos capaces de pensar por sí mismos y de apreciar el valor de la motivación propia.
  • Estimula el interés por las ciencias tecnológicas, uno de los campos de mayor futuro profesional.

Además de esos campos en los que se aprende gracias a la robótica, para un desarrollo pleno e integral de los niños, sigue siendo fundamental que se complemente con otros aprendizajes que se tiene cuando se está en interacción con otros niños (relación entre iguales) y humanos (relación entre diferentes), porque las habilidades sociales siempre han sido y serán muy importantes no solo para lograr el éxito en la vida sino también para entenderse a sí mismo y alcanzar valores más altos de felicidad.

Asimismo, debería también complementarse con el estudio de la naturaleza, ya que no debemos olvidar que todos los inventos tecnológicos incluyendo los robots están copiados de agentes que han sido creados por la naturaleza y sus mecanismos.

Entendimiento lógico entre humanos y máquinas ¿El verdadero proceso de transformación digital?

Mucho se ha hablado sobre el reemplazo que ha comenzado a generar la inteligencia artificial en los trabajos de oficina, pero ¿realmente será reemplazo? O más bien, se trata de cambios que produce el avance de la tecnología, como también los que se están produciendo en el “trabajo humano”, donde se tiene en cuenta la Inteligencia emocional, como la capacidad de reconocer y entender las emociones de uno mismo y de los demás a la hora de tomar decisiones que nos permiten obtener resultados positivos.

El desarrollo tecnológico marcará las próximas décadas que viviremos los seres humanos, lo que indica que cada día las acciones que deberán afrontar las empresas serán más difíciles. Está claro que la tecnología es una herramienta muy importante para el desarrollo y crecimiento de la empresa.

En tal sentido, podemos afirmar que cada vez es más necesario un entendimiento lógico entre humanos y máquinas, pero, ¿Cómo se consigue esta convivencia entre neuronas y bytes? En los últimos años cientos de estudios han certificado la necesidad de que empresas de todos los sectores (y sus empleados) vivan una auténtica transformación digital en medio del despliegue de la inteligencia artificial. Es decir, que se adapten a los cambios que han impuesto las dinámicas de los mercados por la pujanza de las nuevas tecnologías.

El verdadero proceso de transformación digital

Muchos de los perfiles, hasta ahora imprescindibles en las empresas, se ven incapaces de adaptarse a este entorno tan volátil, convirtiendo a las máquinas en sus peores enemigos por ser capaces incluso de “robarles su puesto de trabajo. Entonces, el principal problema de esta transformación digital necesaria estaría en sus recursos humanos. La justificación de muchos puestos de trabajo es cada vez más débil al tiempo que se despliegan drones, coches autónomos o asistentes por voz capaces de desempeñar las labores que hasta ahora solo podían realizar las personas.

Por su parte, las principales empresas tecnológicas del mundo están haciendo su propio back to the basics. Es decir, a la hora de realizar sus procesos de selección, los conocimientos técnicos sí son imprescindibles, pero las habilidades personales para saber gestionarlos, lo son todavía más. Estas habilidades trasversales se vinculan a la conocida como inteligencia emocional. El objetivo de este tipo de inteligencia es conseguir en cualquier decisión un equilibrio real entre la parte racional (la que nos ayuda a analizar, evaluar y calcular) y la parte emocional (la que incluye sensaciones y sentimientos).

Hoy en día este tipo de habilidades pueden ser más valoradas que el tener un expediente académico brillante, aunque parezca incongruente, debido a que una persona con mayores dotes sociales será capaz de buscar las mejores estrategias para alcanzar el éxito sea cual sea la empresa y en cualquier sector.