El cambio climático está acelerando la frecuencia y la intensidad de las olas de calor extremas.
Investigaciones recientes han demostrado que las olas de calor en los veranos de 2022 y 2023 en el Mediterráneo occidental, con anomalías de temperatura de +3,6°C y +2,9°C respectivamente, superaron las variaciones climáticas naturales de los últimos mil años.