La escasa disponibilidad del suelo produce que entre el sector primario y la industria fotovoltaica tengan que buscar una nueva forma de repartirse el terreno. Por ese motivo, la agrivoltaica permite compatibilizar la explotación agrícola y la producción de energía solar en un mismo suelo.
Este nuevo sistema de producción se ha limitado a la plantación de poca altura, como los cereales, para que la sombra de las plantas no suponga un problema en la cantidad de luz que reciben las placas solares. Un estudio elaborado por la universidad de Córdoba pone de manifiesto la compatibilización de los paneles solares con las plantaciones en la misma superficie de los árboles en seto.
El equipo de investigación “Física para las Energías y Recursos Renovables” ha concluido que un tipo de colectores que giran sobre un eje horizontal puede optimizar la captación de luz, después de realizar una simulación de sombreado sobre unos cultivos con placas solares. Además, se ha identificado un espacio geométrico entre las filas de los paneles con el cultivo de los árboles en seto; asimismo, se ha demostrado que en una sola hectárea de suelo podría generar la misma producción agrícola y fotovoltaica que en 1,47 hectáreas.
La investigación titulada: “Design and analysis of a tracking / backtracking strategy for PV plants with horizontal trackers after their conversion to agrivoltaic plants”, incide en que la combinación de ambos sistemas, producción agrícola y fotovoltaica, supone un rendimiento económico global. Sin embargo, para ello es primordial el movimiento de las placas móviles para que las posibles sombras puedan corregirse a lo largo del día según la orientación del sol. De esta manera, se optimiza al máximo el sistema.