El dueño de la marca de ropa Patagonia, Yvon Chouinard, ha decidido traspasar la empresa a un fideicomiso y ha creado una organización sin fines de lucro que permitirá utilizar las ganancias de la compañía, valorada en 3.000 millones de dólares, para luchar contra el cambio climático.
La empresa de ropa nacida en 1979, focalizada en aventureros, tiene una línea de valores muy fuertes y promueve una filosofía de empresa hacia la preservación del medio ambiente y romper con los valores estipulados en la economía tradicional. Por poner unos ejemplos, las tiendas de Patagonia no abren durante los eventos más importantes del consumo, como el Black Friday. Además, seguirán destinando, como lo hacían hasta ahora, el 1 % de sus ventas a organizaciones ambientalistas.
La empresa Patagonia seguirá trabajando como corporación privada con fines de lucro, pero la familia Chouinard, que controlaba la entidad hasta el mes pasado, ya no es propietaria de la empresa, Por lo tanto, la compañía queda de la siguiente manera: un fideicomiso que tendrá el 2 % de los títulos de la empresa, el Patagonia Purpose Trust; y una organización sin fines de lucro, Holdfast Collective, que será propietaria del 98% de la marca de ropa. Estos dos organismos se formaron para distribuir los 100 millones de dólares que genera anualmente la empresa para luchar contra el cambio climático y proteger las reservas ecológicas del mundo. Sin embargo, el fideicomiso obliga a los integrantes de la familia Chouinard a vigilar que los recursos estén siendo empleados de la forma que está estipulada por contrato.
Holdfast Collective
La organización Holdfast Collective ya ha recibido donativos de 50 millones de dólares y pronto recibirá 100 millones más. La entidad se ha fundado de una forma que no permite a los dueños de la empresa a obtener beneficios fiscales por las donaciones. Es una manera de luchar contra el greenwashing que buscan todo empresario para pagar menos impuestos.