Energéticas y petroleras se unen en torno al hidrógeno verde

El hidrógeno verde ha pasado en tiempo récord de ser un gran desconocido a ser uno de los protagonistas en innovación y desarrollo energético. Y es que la promesa de generar energía con cero emisiones pesa mucho en estos tiempos de descarbonización y transición energética. Es por eso que el número de proyectos relacionados con este campo se ha multiplicado por 9 en menos de dos años, y que empresas como Shell, BP, Total, Iberdrola, Enel o Equinor por nombrar algunas, se estén uniendo a este mercado, lo que aporta por otro lado un claro indicador de la inminente desaparición de los combustibles fósiles.

Los proyectos de estos líderes en energía que están saliendo a la luz tienen que ver con importantes inversiones y asociaciones que tienen cuyo objetivo principal es producir hidrógeno con bajas emisiones de carbono.

El informe titulado 2050: The Hydrogen Possibility publicado por una empresa analista del grupo Verisk, augura que para el 2050 por lo menos el 7% de la demanda mundial de energía se cubrirá con hidrógeno bajo en carbono, aumentando la demanda del mismo a 211Mt. Pero las acciones están destinadas también en el corto plazo. Se estima que durante los próximos 10 años casi todo el porcentaje del despliegue de este compuesto, será para mitigar sus principales adversidades como su producción de origen fósil. Una vez que se consiga un nivel muy bajo de emisiones para producirlo, será el aliado perfecto para acelerar la descarbonización.

Gobiernos y sectores privados se están uniendo en masa a esta industria para acelerar el cambio de paradigma energético. Empresas como Nel dedicadas a los electrolizadores, han puesto como prioridad llegar en cinco años a bajar el precio del hidrógeno de bajas emisiones hasta 1,5 dólares por kilogramo, lo que lo haría más competitivo que el obtenido con combustibles fósiles. De cara al 2030 Francia está planteándose llegar a los 6.5 GW provenientes de esta fuente sustentable.

Del mismo modo, Alemania y UK estiman producir hasta 5GW en el mismo período. En total y para los próximos diez años se calcula que la Unión Europea logrará producir unos 40GW de despliegue de electrolizadores. Pero esta industria avanza a pasos agigantados y ha superado todas las expectativas en muy poco tiempo, por lo que es posible que en la siguiente década la producción sea mayor y esté más asentada.

Estamos asistiendo también a cómo las eléctricas como RWE o Iberdrola están estableciendo convenios y contratos con petroleras como Shell o BP con el fin de poner en marcha diversos proyectos de hidrógeno verde que requieren gran inversión en infraestructura.  En la actualidad ya se están produciendo 26GW con origen en el hidrógeno, pero varias naciones han establecido objetivos a corto plazo para llegar a 66GW, lo que augura un crecimiento exponencial del mercado y de toda la industria que trabaja en su innovación.

Aunque es pronto para asegurar cómo se va a comportar esta industria, lo que es casi una certeza es que está jugando un papel muy importante para el nuevo modelo energético mundial, y por ende veremos como diferentes tipos de empresas (especialmente las automotrices y las energéticas) van a desarrollarse en torno al hidrógeno.