La petrovita: ¿El almacenamiento del futuro?

El mineral recientemente descubierto en la península de Kamchatka en el este de Rusia en un gigantesco macizo volcánico conocido como petrovita, está dando mucho de qué hablar especialmente en el entorno del almacenamiento de energía. Está compuesto de átomos de oxígeno, azufre de sodio y cobre dando lugar a la formación de una estructura porosa. A través de los canales formados en los poros de esta estructura pueden desplazarse pequeños átomos de sodio. Esta característica es la que lo ha puesto en el punto de mira científico, pues parece ser propenso a la conductividad iónica lo que hace posible utilizarlo como material de cátodo en baterías de iones de sodio. Esto podría reemplazar de forma económica y muy eficiente a las baterías de litio actuales.

El director del equipo de investigación que llevó a cabo el hallazgo en la cima del volcán Tolbachik y profesor del departamento de cristalografía de la Universidad de San Petersburgo, Stanislav Filatov, declaró para la revista Mineralogical Magazine donde se publicó el descubrimiento que actualmente uno de los mayores problemas de dicho uso, es la cantidad de cobre como metal de transición en la estructura cristalina del mineral, pero esto puede solucionarse creando en el laboratorio un compuesto sintético de la misma estructura que la petrovita.

La petrovita es un mineral que se genera a partir de agregados globulares azules de cristales tabulares con forma de tablas de hasta 0.2mm en dimensión máxima que generalmente contienen inclusiones gaseosas. Su fórmula es Na10CaCu2(SO4)8 y una de sus particularidades es su extraña coordinación de siete átomos de oxígeno que solo se conocía en otros dos compuestos siendo uno de ellos la saranchinaita, también descubierta por un equipo de científicos de la misma universidad rusa esta vez dirigido por el profesor Oleg Siidr. El mineral también se caracteriza por tener un color azul intenso.

Filatov se ha dedicado durante los últimos 40 años al estudio de los minerales de conos de escoria y flujos de lava en fumarolas en la península donde se hizo el descubrimiento del nuevo mineral. Él junto con otros científicos de diversas instituciones rusas han sido los descubridores de multitud de minerales que se cuentan por decenas en Kamchatka, muchos de ellos siendo únicos en todo el planeta.

El equipo bautizó al nuevo mineral con el nombre de petrovita haciendo honor al cristalógrafo de la misma institución Tomas Petrov, el creador de la tecnología que permitió el cultivo de malaquita con fines para joyería.